El mar de Formentera tiene una luz y un color únicos. Esa fue la inspiración para realizar la sesión de fotos del catálogo de bikinis Super Aloha, una marca que confía en la naturalidad, la frescura y el estilo mediterráneo. Como fotógrafo local de Formentera, mi trabajo fue crear imágenes que transmitieran esa esencia: azul turquesa, arena blanca y la libertad que define a la isla.
La sesión se desarrolló en diferentes localizaciones cuidadosamente elegidas. Pasamos por calas de agua cristalina, zonas rocosas con textura y pequeñas playas escondidas donde el mar se mezclaba con el cielo. Con la diseñadora de Superaloja planificamos los tonos, la hora ideal de la luz y los escenarios más adecuados para cada modelo de bikini. Todo se realizó en una mañana intensa de trabajo, aprovechando la calma y la energía del amanecer en la isla.
Parte fundamental del proyecto fue la gestión de permisos para fotografiar en playas protegidas de Formentera, algo que solo un fotógrafo local puede organizar con rapidez y conocimiento. Gracias a esa coordinación, el equipo pudo concentrarse en la creatividad y en la producción sin interrupciones.
La modelo profesional aportó una actitud natural y elegante, conectando perfectamente con el entorno. Cada fotografía reflejó el espíritu de la marca: prendas ligeras, colores vivos y la sensación de verano infinito que solo Formentera puede ofrecer.
Superaloja consiguió un catálogo fresco, natural y auténtico, con imágenes pensadas tanto para su web como para redes sociales y campañas digitales. Y para mí, como fotógrafo en Formentera, fue una oportunidad de mostrar una vez más cómo la luz de esta isla puede transformar una producción de moda en algo inolvidable.

